Son muchas las ocasiones donde un interim manager es necesario en una organización. Los escenarios más habituales son bajas temporales de directivos, grandes transformaciones en la empresa, etc. Una de las principales oportunidades para mejorar la gestión de la empresa de una manera muy controlada, es su incorporación a los comités de dirección o consejos de administración de la empresa. Sin embargo, existen muchos miedos a cualquier alteración del statu quo de la gerencia de una empresa.
La incorporación de un experto en gestión cualificado y con experiencia que considere y someta a juicio crítico las principales tomas de decisiones de la compañía otorga una garantía adicional y un punto de vista objetivos al proceso. En este caso de éxito, una empresa de mecanización de piezas para el sector de automoción industrial abordaba, una vez finalizado el proceso de sucesión empresarial, la reorganización del negocio como consecuencia de la toma de control de la empresa por parte de los tres hermanos herederos.
La constitución de un comité de dirección en el que participaban los hermanos junto a nuestra incorporación como interim managers, posibilitó una profunda transformación del negocio, minimizó las fricciones internas, y anticipó los posibles desajustes. Esto permitió una focalización en los clientes y la tranquilidad de saber que están tomando las mejores decisiones. El resultado se manifestó a través de incrementos superiores al 30% anuales, manteniendo controlados los riesgos asociados al crecimiento. En la actualidad, esta empresa sigue creciendo a buen ritmo y de forma sostenida durante los últimos años.